En el mundo moderno, se presta gran atención al cultivo de productos y hortalizas respetuosos con el medio ambiente. Se están introduciendo tecnologías agroindustriales avanzadas y mejoradas, que permiten obtener una rica cosecha de tomates en invernaderos de policarbonato a un costo mínimo. Una de estas tecnologías es el acolchado, que cubre la superficie de la capa de suelo fértil con materiales de origen natural o artificial. Averigüemos si necesita triturar tomates en un invernadero y cómo hacerlo.
El propósito de triturar un tomate en un invernadero y campo abierto.
Los principales propósitos de triturar tomates cultivados en invernadero y en campo abierto son:
- Protección del suelo del invernadero contra la compactación excesiva y la formación de una costra impermeable;
- Proporcionar humedad natural y temperatura del suelo durante mucho tiempo;
- Reducir la frecuencia de riego y la cantidad de agua dulce utilizada;
- Prevención del desarrollo y transferencia de patógenos y plagas del suelo a las plantas;
- Protección contra la desecación de la capa superior del suelo del invernadero como resultado de la intensa radiación solar;
- Mejorar la fertilidad del suelo y aumentar el rendimiento general de tomates.
Características de triturar tomates.
En un espacio cerrado de invernadero y a temperaturas elevadas, se produce un proceso acelerado de evaporación de la humedad. La alta humedad ralentiza el crecimiento y el desarrollo de los tomates, crea condiciones favorables para la aparición de diversas enfermedades. Por lo tanto, la introducción de mantillo es de la mayor importancia en las condiciones de cultivo de hortalizas en invernadero.
Materiales necesarios
Los más comunes son los siguientes materiales:
- orgánico (natural): aserrín, heno o paja, pasto recién cortado, compost;
- inorgánicos (artificiales): papel y cartón, películas, fieltro para tejados, fieltro para tejados y otros tipos de materiales de revestimiento en rollo.
Película
Se puede utilizar una película opaca estabilizada a la luz como material de película. Antes de acostarse en la cama, la película se endereza en toda su longitud y se fija. Para plantar semillas o plántulas, se hacen previamente agujeros especiales en la película.
Cortar el césped
La hierba cortada durante mucho tiempo retiene la humedad natural del suelo en el invernadero, lo que permite reducir el número de riegos varias veces. Para protegerse de los insectos dañinos, la hierba recién cortada se corta finamente y se deja secar al sol durante varios días.
Heno (paja)
El mantillo con pasto seco o paja ayuda a evitar que las malas hierbas broten y proporciona una protección confiable de las plantas contra las plagas. Al cultivar variedades de tomates de bajo crecimiento, el heno juega el papel de lecho para las frutas que se encuentran sobre él. Los frutos siempre permanecen secos, limpios, por lo que no están sujetos a descomposición o infección por bacterias patógenas.
Papel (cartón)
Antes de cubrir un lecho de periódicos, papel o cartón, la tierra alrededor de los tomates se afloja y se fertiliza adicionalmente. Luego se tritura el papel y se aplica una capa al lecho del jardín, previamente humedecida con agua o una solución de fertilizante líquido (compost).
Cuando se aplica sin esmerilar, se prefabrican una gran cantidad de orificios en el papel para que el aire y la humedad pasen sin obstáculos.
La principal desventaja del papel es la falta de sustancias útiles, por lo tanto, se agrega una capa de materia orgánica fértil sobre la capa colocada.
Serrín
El mulching con aserrín se considera el método más común.
El grosor de la capa colocada se toma igual a 10-15 cm. Una capa más delgada puede causar una rápida germinación de las malezas. El aserrín retiene perfectamente la humedad del suelo, por lo que el suelo siempre está en un estado natural y húmedo. El aserrín facilita el deshierbe y la eliminación de malas hierbas. El aserrín absorbe perfectamente y deja pasar el exceso de agua.
La principal desventaja del aserrín es que toman la mayoría de los oligoelementos útiles (especialmente nitrógeno) de las plantas y contribuyen a la oxidación del suelo.
La capa colocada de mantillo de madera se impregna con una solución de urea para proporcionar nitrógeno adicional al suelo. Para evitar la oxidación del suelo, se agrega cal apagada o tiza al aserrín.
Compost
El mantillo de compost es la protección y nutrición más excelente para los tomates en el invernadero.
La estructura de la cama debe estar completamente podrida, homogénea, quebradiza, inodoro, sin aserrín ni impurezas. El estiércol de caballo es el mejor abono para los tomates.
Como fertilización adicional del suelo, el mejor efecto es la aplicación de fertilizante en forma de una solución de abono líquido.
El espesor de la capa se considera de 20 cm. En este caso, la siembra de semillas y plántulas de tomates de invernadero se realiza no en el suelo, sino directamente en el compost, a una profundidad de 1-3 cm.
Materiales no aptos para mantillo
No se recomienda utilizar la corteza y las hojas de los árboles coníferos como mantillo para tomates cultivados en invernadero.que contienen sustancias volátiles específicas y aceites esenciales que pueden alterar la actividad vital de microorganismos beneficiosos. Lo más correcto y efectivo será la quema de estos componentes con el posterior uso de cenizas.
El fieltro para techos (fieltro para techos) que contiene sustancias tóxicas también se considera inadecuado. No se recomienda el uso de turba pura, que promueve la oxidación del suelo.
Por lo tanto, una elección competente del método y el material para el acolchado conduce a una reducción significativa en el costo de cultivar tomates en un invernadero. Los numerosos beneficios de utilizar este procedimiento le permiten obtener una cosecha rica y de alta calidad de estas maravillosas y saludables verduras.